Las carencias de micronutrientes son un problema de salud pública en Burkina Faso, y afectan especialmente a las mujeres embarazadas, lactantes y niños.
La región de Boucle du Mouhoun es una zona considerada el “granero del país” no obstante, la agricultura manual poco mecanizada impide el aprovechamiento de las fuentes primarias, y con ello, la mejora en la nutrición y la generación de ingresos en un país donde la inseguridad alimentaria aumenta día tras día.
Por esta razón, en colaboración con la Fundación Religiosos para la Salud, hemos puesto en marcha un molino para la transformación de productos agroalimentarios (mijo, soja, maní, sésamo y papas amarillas) en harina de misola enriquecida con suplementos minerales, vitaminas, calcio y amilasa industrial, con alto valor nutritivo.
Este tipo de harina es un alimento complementario a la lactancia materna destinado al tratamiento terapéutico y preventivo de la desnutrición.
El proyecto incluye la capacitación de 30 mujeres en la producción de huertos y el correcto uso del molino, para garantizar la viabilidad del proyecto.
Los resultados de la iniciativa ha sido la distribución de 3200 sobres de harina entre niños desnutridos, 500 entre mujeres embarazadas y lactantes, además de la formación de 5.000 hombres y mujeres en la elaboración de gachas para mejorar la nutrición infantil.